El cansancio físico puede reemplazar su cansancio psicológico.
Correr proporciona bienestar psicológico al atleta. Al correr, el cuerpo produce sustancias que reducen la fatiga en el cuerpo, endorfinas y encefalinas. Estas sustancias inhiben el dolor y aportan tranquilidad y placer, son sustancias consideradas analgésicas, producidas por el propio cuerpo.
Correr proporciona bienestar psicológico al atleta. Al correr, el cuerpo produce sustancias que reducen la fatiga en el cuerpo, endorfinas y encefalinas. Estas sustancias inhiben el dolor y aportan tranquilidad y placer, son sustancias consideradas analgésicas, producidas por el propio cuerpo.
Durante la carrera, el atleta puede experimentar cansancio severo que se caracteriza por dolor muscular e inquietud emocional. El cansancio se debe a la falta de preparación física, respiración incorrecta, deshidratación, dieta incorrecta y falta de descanso.
Cuando correr se vuelve diario, la resistencia cardiorrespiratoria, la estructura corporal, la fuerza y la resistencia muscular mejoran. Además de dar la sensación de bienestar. El acto de correr comienza a traer resultados positivos para el cuerpo.
Por lo tanto, correr puede considerarse antiestrés, ya que aumenta la autoestima y la confianza en sí mismo. Correr el atleta cambia el cansancio mental por el cansancio físico, un intercambio positivo.